El sueño del bebé, es el momento en que estos descansan y se cargan de energía. Conocer las horas que debería dormir es una inquietud que tienen muchos padres, sobre todo cuando son primerizos.
Las horas de sueño y buenos hábitos para dormir se pueden aplicar correctamente desde sus primeros meses de vida. Para ello, a continuación, te traemos mayor información sobre los aspectos más importantes para el sueño del bebé, pero debes tener en cuenta que cada pequeño es diferente. Te recomendamos consultar con tu pediatra todas tus inquietudes sobre este tema.
Las horas de sueño pueden variar de acuerdo a cada pequeño y dependen de la edad de estos. Sin embargo, es importante crear un hábito que les brinde el mayor descanso para su bienestar, además, garantizar buenos hábitos para dormir evita que los pequeños se despierten durante la noche de manera muy repetitiva, que se acuesten muy tarde o que durante el día tengan cambios de actitudes como estar más hiperactivos o irritables.
A continuación, te explicamos las horas de sueño aproximadas que debería tener un bebé de acuerdo a sus edades y algunos hábitos para dormir.
Cuando los bebés nacen, no tienen su reloj interno bien desarrollado, es por ello que, aunque pueden dormir hasta 18 horas de las 24 horas del día, también, suelen despertarse en horarios descontrolados.
A medida que pasan las semanas, los pequeños comienzan a dormir más horas seguidas durante la noche. Por lo general, al llegar a las 2 primeras semanas de nacidos llegan a tener de 4 a 5 horas de sueño seguidas. Sin embargo, se calcula que no es hasta los 3 meses de edad que comienzan a tener un horario de sueño de 8 horas durante toda la noche, disminuyendo las despertadas en la madrugada.
De igual forma los bebés en esta etapa pueden llegar a tener hasta 3 siestas durante el día. Cabe destacar que hasta los 6 meses es normal que los pequeños lloren o generen ruidos al despertarse. Aunque también son capaces de dormirse a solo minutos después de despertarse, sobre todo durante las noches.
Esto ocurre debido a que los bebés normalmente interrumpen sus horas de sueño porque tienen hambre o sienten alguna incomodidad. Ya sea porque ensuciaron su pañal o cualquier otro inconveniente.
Un buen hábito para que tu bebé duerma sin tantas interrupciones, es evitar estimularlos de manera innecesaria, tales como encender la luz al despertarse o alumbrar con un dispositivo móvil mientras intentas a que se duerma de nuevo. Durante las noches se debe evitar jugar, así como hablarles de forma muy activa, ya que es importante enseñarles que dicho horario es para dormir después de la alimentación y el cambio del pañal.
Por otra parte, para generar un buen hábito de sueño, puedes implementar una rutina diaria cada noche. Como, por ejemplo, cantarle suave, darle un baño relajante, leerles un cuento o cualquier otra actividad que se pueda asociar a la hora del sueño.
Poner en práctica estas rutinas, va a permitir que tu bebé aprenda a dormirse por sí mismo de manera calmada durante las noches en caso de despertarse de madrugada. Además, le aporta mayor tranquilidad.
Cuando los bebés cumplen los 6 meses de edad suelen tener un horario de sueño de 14 horas repartidas durante el periodo de 24 horas. De las cuales durante el día suelen tomar al menos 2 siestas de 30 minutos a 2 horas seguidas cada una y durante la noche pueden seguir teniendo sueños interrumpidos.
En caso de que en la noche se siga despertando, será fundamental comenzar a aplicar algunos hábitos que irán modificando esa conducta, permitiendo que el bebé duerma durante toda la noche sin interrupciones.
Los mejores hábitos que puedes aplicar son los mismos hábitos que cuando recién nacido. Es decir, que evites jugar con él, no enciendas la luz e intentes relajarlo. Por lo tanto, mientras menos interrupciones o incentivos durante las horas del sueño, más rápido será su aprendizaje para dormir por sí solo.
Además, lo ideal es que cuando un bebé en esta etapa se despierta de madrugada, no se saque de la cuna inmediatamente. Es recomendable esperar unos segundos o minutos, ya que generalmente se suelen dormir por sí solos nuevamente. En caso de que se note mucha incomodidad de parte del bebé, pero notes que todo está bien, déjalo en su cuna e intenta hablarle con suavidad y acariciarlo para tranquilizarlo.
Es importante, evitar sacarlos de la cuna de manera inmediata, ya que esto creará un hábito en los pequeños. Esto no significa que no estés pendiente, solo evita llevarlo a los brazos rápidamente para no acostumbrarlo.
Por supuesto, en casos donde el pequeño presente síntomas de alguna afección, va a requerir de la mayor atención y cuidado. Si notas que aún sacándolo de la cuna, la incomodidad permanece en el bebé, acude a una persona de confianza y/o especialista.
Sin importar la etapa de tu bebé, existen algunos hábitos que puedes aplicar para que éste tenga las horas de sueño necesarias. Entre ellas están:
Por último, es importante que el bebé cuente con un espacio apropiado donde dormir y que, asimismo, tenga ropa que le aporten frescura, suavidad al tacto, transpirabilidad y comodidad para que no sienta molestias al dormir.
Puedes comprar pijamas, mamelucos, bodies o cualquier otra prenda con la que tu bebé se sienta completamente cómodo. Lo ideal es que las prendas sean suaves y elaboradas en algodón para garantizar la transpirabilidad de su piel y así evitar que desarrolle irritaciones por el sudor.
No, los bebés no saben diferenciar la noche del día hasta que llegan a una edad de 6 meses o más. En esta etapa es donde comienzan a aprender las diferencias y suelen dormir más durante la noche y estar más activos durante el día.
Los bebés por lo general muestran con facilidad signos de tener sueño. Por lo tanto, si captas estas señales con rapidez, te será más sencillo crear un hábito. Asimismo, las rutinas constantes antes de que tu bebé duerma son fundamentales, además de brindarle la mayor comodidad en sus horas de dormir.